miércoles, 22 de febrero de 2012

Todo depende del lente con que se mire

Por años había escuchado este refrán y nunca le di mucha importancia hasta este momento de mi vida. Hoy añade un gran valor y solo se debe a que cambie mi lente.


Desde pequeña utilicé los lentes que me dieron mis padres, maestr@s, amig@s, conocid@s, medios de comunicación, entre otr@s, para apreciar el mundo que me rodeaba.  De esta forma solo lograba repetir las mismas experiencias, palabras e ideas que otr@s habían experimentado y luego infundido en mí.  Cada una de ellas se convirtieron en la “verdad” de mi vida por lo que todo aquello que lo contradijera o representara una amenaza, me hacía sentir incomoda e insegura. 
Cada una de mis “verdades” habían sido muy bien alimentadas con ideas dadas por personas de gran valor y por ende, con gran poder de influencia en mi vida.  Ell@s las habían cultivado y cuidado por años y me la transmitieron con el propósito de que las cultivara y cuidara de igual forma.  Las cuidaba como si fueran mías, las alimentaba con tradiciones, costumbres y si era necesario lucharía contra todo aquello que amenazara, pusiera en duda, contradijera o finalizara  esa “verdad”.
En mis primeros años de vida fue muy difícil cumplir con esta responsabilidad, pues desde pequeña era muy “testaruda” según mis padres y  comprendí que esto no era bueno para l@s demás.  Mientras me comportaba tal y como ell@s creían que debía hacerlo tod@s eran muy felices, pero todo era muy diferente cuando me comportaba diferente a lo que ell@s esperaban.  De esta forma “aprendí” que para lograr Ser la persona que debía Ser sin tropiezos ni malestares con l@s demás solo debía repetir, imitar o copiar con exactitud todo lo que estas personas me habían enseñado.
Mientras más me parecía a ell@s más me elogiaban, aceptaban, celebraban, apoyaban, se sentían muy felices y orgullos@s, tod@s excepto YO.  ¡Era muy difícil complacer a tod@s!  La razón es simple, cada un@ utilizaba un lente completamente diferente.  Para cada un@ de ell@s cada cosa tiene un significado especial, por lo que la “verdad” que brinda la felicidad de mis padres, maestr@s, amig@s y otr@s jamás podría representar la “verdad” que brinda la mía.
En el deseo de cumplir con todas las exigencias y “verdades” de los demás me sentí  perdida y llegué a un estado que hemos llamado depresión, el peor estado que he experimentado en toda mi vida.  Todo el “Mundo” que había creado de las “verdades” de otr@s se había ido al piso y sin importar que hiciera o intentara para revivirlo nada funcionaba por lo que decidí hacer lo único que me faltaba,  Construir un “Mundo” nuevo con mis propias “verdades”.

Crees que esta narrativa te describe?  Te identificas con esta situación?  Quieres conocer un poco más sobre cómo establecer Tus propias verdades?   Síguenos aquí, facebook y youtube.  Envíanos un mensaje a nuestro email, skerrettenterprise@gmail.com , asunto: interesad@,  para una invitación exclusiva a nuestros talleres en vivo vía internet.  Toma 15 minutos de Tu día y descubre cómo establecer Tus nuevas verdades!!! 
Escríbenos a:  skerrettenterprise@gmail.com  y te responderemos con la información que necesitas para Tu invitación exclusiva!