En la
mayoría de las veces creemos que el éxito es para ciertas personas y no posible
para nosotros mismos. Sin embargo,
constantemente escuchamos historias de éxito de personas muy cercanas a
nosotros. Hoy quiero compartir una
historia de éxito de una gran amiga,
Rebeca.
(Rebeca y Yo
nos conocimos desde muy jóvenes, por lo que he elegido una de las historias que
me más disfruto y me causa mayor admiración.)
Rebeca
siempre fue reconocida por el amor incondicional que brindaba a sus
amistades. Ella es de las amigas que
hace lo que sea necesario para ver a sus amistades BIEN. Sus detalles son innumerables y sumamente
especiales, sin importar las condiciones que existan, como distancia o tiempo.
Una vez
terminó sus estudios como enfermera graduada, profesión perfecta para continuar multiplicando su semilla de amor, se casó y se mudó a los Estados Unidos. Lejos de su país natal, lamentablemente, Rebeca tuvo que enfrentar un suceso que marcaría su vida
por siempre.
En un
estado de tristeza y depresión sus planes se dilatarían. Se encontraba en un país extraño, muy lejos
de sus familiares y amistades que tanto la aman, pero acompañada de su esposo
espectacular, Charlie.
El sabía
muy bien lo espectacular que era su esposa y le apoyó a dar sus primeros
pasos. Comenzó tomando muestras de
sangre en un laboratorio, algo sencillo para una enfermera graduada, pero un
reto por la diferencia en las culturas y el idioma. Rebeca me contó cómo se burlaban sus
compañeras de trabajo por su inglés “masticao”.
También me compartió los retos que se encontraba día a día, pero con
orgullo me narró cómo fue creando sus propias estrategias para ir sobre los obstáculos
a los que se enfrentaba.
Su esfuerzo hizo que fuera imposible notar su excelente
labor ante sus empleadores lo que abrió las puertas a varias ofertas de trabajo. Hoy día trabaja en
uno de los hospitales más reconocidos en
el estado en donde vive. Hoy Rebeca
terminó sus estudios de maestría y dirige una de los departamentos de este hospital donde
enseña, apoya y supervisa con mucho amor a sus compañeros y amistades.
A pesar de
sus procesos de dolor y retos mayores Rebeca continuó creyendo en ella. Es admirable en la forma que transformó todo lo negativo a su favor. Estoy segura que no siempre se sintió muy Bien en este proceso,
pero sin duda SIEMPRE Creyó en Su Propio Éxito.
La próxima
semana hablaré sobre otro punto muy importante para lograr Tu propio
Éxito. Sígueme y comparte con tus seres
amados.
Aprende sobre este y otros temas leyendo , Tu Eres, adquiérelo HOY y comienza tu camino al Éxito.
En uno de los escritos anteriores, Ya eres exitoso, expliqué que la vida
que disfrutas el día de hoy es el logro de las metas establecidas en tu
pasado. Si aun no sientes la
satisfacción y felicidad con los logros que has alcanzado hoy puede deberse a que
solo has logrado metas que otros establecieron y creyeron perfectas para Ti.
